El término alta sensibilidad hace alusión a un rasgo de la personalidad identificado y acuñado por la psicóloga estadounidense Elaine Aron. No se trata de timidez, aclarar este punto fue el motor inicial de sus investigaciones. El niño altamente sensible nace con una tendencia a ser más consciente de todo lo que le rodea. Dispone de una profunda capacidad de reflexión interior, piensa mucho antes de actuar o tomar decisiones, es empático, creativo, inteligente e intuitivo, además de atento y muy concienzudo en su proceder. Esto también tiene su parte negativa: percibir tantos estímulos con semejante lujo de detalle a veces puede ser agobiante, destapándose así su carácter sensible, quizá a veces tímido o retraído porque necesita evitar este tipo de situaciones intensas para no abrumarse. Si tienes este libro entre tus manos es porque sospechas que tu hijo pueda ser un niño altamente sensible. Y tomando el tiempo de leer sus páginas, le estarás haciendo un gran regalo, porque aprenderás a entender cómo funciona tu hijo y qué necesidades tiene. A lo largo de sus páginas Úrsula Perona nos da las herramientas necesarias para conocer a tu hijo altamente sensible, aceptarle y amarle incondicionalmente. Saber qué necesita para su desarrollo integral respetando su personalidad y su naturaleza sin tratar de cambiarle ni moldearle. Simplemente, siendo los compañeros de viaje que necesita.