Como introducción general a la ética de la investigación, esta obra ofrece recursos para todo aquel que se dedique al campo científico y quiera descubrir los valores que configuran sus prácticas cotidianas, además de plantearse en qué medida promueven una cultura de la responsabilidad solidaria. La ética de la investigación se ha convertido en una de las éticas aplicadas más interesantes en la sociedad del conocimiento y la era de la globalización. A diferencia de otras éticas aplicadas que afectan a ciertos ámbitos particulares o a determinadas actividades profesionales, la actividad investigadora está en el corazón mismo de aquello que define nuestro tiempo: el conocimiento y su valor o sentido para la vida de la humanidad. Es por ello que, hoy más que nunca, es necesaria una ética de la investigación que, además de reconstruir el factor vocacional de la actividad investigadora como profesión, oriente cívicamente la responsabilidad en un horizonte de solidaridad global, que no se limite a describir las normas o los códigos que guían la investigación clínica y que descubra, clarifique y promueva la dimensión ética de la actividad investigadora, entendida ahora en un sentido muy amplio.